Balonmano, juego
de pista o campo disputado por dos equipos cuya finalidad
es enviar la pelota a la portería contraria, lanzándola
con una mano desde fuera de la línea que delimita el
área de puerta. Como juego de campo cada equipo tiene
once componentes; jugado en pista cerrada, que es lo más
común, los equipos están formados por cinco
o siete jugadores. La pista tiene 40 m de largo y 20 m de
ancho, con una portería en cada uno de los lados menores.
La pelota tiene una circunferencia de 58 a 60 cm y pesa de
425 a 480 g.
Un partido dura
una hora, dividido en dos mitades. Hay un anotador y un cronometrador
así como dos árbitros. El partido comienza con
un saque desde el centro del campo y el juego se desarrolla
entre pases, lanzamientos y regates con la pelota. Los jugadores
pueden parar, lanzar, coger, botar o golpear la pelota preferentemente
con sus manos, aunque pueden utilizar cualquier parte del
cuerpo excepto los pies. Al portero se le permite usar los
pies para defender su portería, y es la única
persona que puede pisar el área de gol. Los jugadores
pueden retener la pelota un máximo de tres segundos
y pueden dar un máximo de tres pasos mientras la tengan
en su poder.
Estas restricciones
no se aplican al portero. La pelota se puede pasar en cualquier
dirección, incluso rodando por la pista. Un jugador
puede golpear directamente la pelota con el puño pero
no puede lanzarla al aire y luego darle un puñetazo.
No existe regla de fuera de juego y esto ayuda a hacer que
el mismo sea fluido y ágil, con la pelota moviéndose
con rapidez de un lado a otro de la pista. No hay mucho juego
de media pista y la mayoría de la acción está
concentrada alrededor de las áreas de portería.