En la antigua Grecia
la lucha formaba parte de las festividades y Calendarios deportivos,
una de las especialidades del pentatlón.
La lucha
tiene tres modalidades: el Sumo cuyo mayor desarrollo se ha
dado en Asia y especialmente en el Japón, la Grecorromana
que fue practicada también en la India y China, gozando
de gran popularidad en muchos países y la Lucha Libre
que se desarrolló en Estados Unidos. Las dos últimas
forman parte del Calendario olímpico.
Fue en
1896 durante los primeros juegos olímpicos que se incluyó
como deporte oficial pero en 1912, en la máxima justa
del deporte amateur celebrada en Estocolmo, sólo se
reconoció la lucha grecoromana, debido a las diferencias
que existían entre los diferentes países respecto
a los estilos y reglamentos. Más tarde, por el peso
mismo de su popularidad que se extendía a todo el mundo
y a pesar de no haber sido estandarizados los reglamentos
y sistemas, fueron aceptadas ambas disciplinas, la lucha libre
y la grecorromana en la O. de Amberes en 1920.
El único
luchador que obtuvo medalla de plata en los Juegos Olímpicos
de los Ángeles en 1984 fue Daniel Aceves, egresado
del gimnasio «Guelatao», del Distrito Federal.
En 1969
quedó constituida debidamente la Federación
Mexicana de Lucha, acrecentándose sus asociaciones
a 15: Distrito Federal, Estado de México, Instituto
Politécnico Nacional, Universidad Nacional Autónoma
de México, Jalisco, Nuevo León, Oaxaca, Puebla,
Querétaro, San Luis Potosí, Veracruz, Yucatán,
Zacatecas, Tabasco, Tamaulipas.
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